DISERTACIÓN AL LÍMITE

CONOCIMIENTO OCULTO, UNA IRONÍA

La suma de conocimientos que a lo largo de la historia hemos ido recogiendo a través de todas las escrituras sagradas, los oscuros libros de la Alquimia, las paginas sagradas de los vedas, el Coran, la Biblia, las arcanas sociedades secretas y todos los libros de sabiduría, para que le han servido al ser humano? Para nada. Al final nos autodestruiremos y volveremos a iniciar nuestra andadura  como el hombre de las cavernas, sometidos  a las miserias, la  violencia, las enfermedades y la muerte.

Hemos recogido, acumulado, atesorado y respetado todo el conocimiento, que podía trasformar a la especie humana en una especie superior capaz de escapar de su fatídico destino, el sufrimiento, las guerras y la muerte. ¿Lo hemos logrado? Para nada

La palanca secreta de todas las fuerzas intelectuales y la llave “divina” de todas las doctrinas ocultas han estado en manos  de unos pocos privilegiados, para que solo la llegaran a conocer los inciados, que han tenido a bien el tenerla oculta para el resto de los mortales, como si eso supusiera la salvación del mundo, Yo les digo ¡!Jilipollas!!.

Poco a poco se han ido conociendo los antiguos textos, y antiguos conocimientos, que sin embargo a nuestros antepasados no les sirvieron para evitar que la humanidad fuera un campo de violencias, atropellos, sufrimientos y exterminio.

Si el recibir  los beneficios de una oculta ciencia o cultura, que antes era patrimonio de unos pocos, que se supone que nos enriquecería tanto cultural como iniciaticamente, ha servido para esto, triste e inútil conocimiento.

Estos conocimientos ocultos, que se supone que es el principio de todas las ciencias  y de todos los progresos del espíritu humano, a quien han servido? Solo han servido para lograr una ciencia sin conciencia, una ciencia que lejos de llevar al ser humano a lo mas alto de su destino, solo le han arrojado en brazos de la voluptuosidad y el materialismo, en brazos  de la garra del instinto atávico, del egoísmo, de la barbarie, de una sociedad técnica y civilizada, que no duda en exterminar a su semejante, si ve invadidos sus intereses, su vanidad, su crueldad.

Estoy diciendo con esto que rechacemos los conocimientos ocultos? NO, estoy diciendo que el valor divino que se le ha atribuido siempre  es una falacia, estoy diciendo que es muy triste que todos esos conocimientos no nos hayan servido para alejarnos del sufrimiento, las miserias y la muerte.

Este conocimiento que se supone que debía ser una especie de lámpara que nos ilumine y nos muestre el camino de la superación, o no ha sido bien asimilado o el ser humano no tiene la inteligencia suficiente para  utilizarlo y lograr a que nos conduzca a ser mejores y perfeccionarnos.

Los privilegios y poderes que se supone no debieran dar  estos conocimientos ocultos, debieran  poder  perpetuar  una razon suprema, que nos alejara de aflicciones y temores, dominar el cielo y la tierra, superar las enfermedades y la muerte y conociendo nuestra razon del pasado, librarnos  de infortunios, calamidades y evitar ser vencidos y derrotados por la muerte, alcanzando la inmortaliad.

La sabiduría encerrada en muchos libros sagrados, se supone que contienen los arcanos para conducirnos a la suprema verdad, que es liberarnos de la miseria terrenal, para alcanzar el espíritu y  llegar a Dios.

Civilizaciones enteras a lo largo de la historia de la humanidad han llegado a lo mas alto de su exaltación como entes racionales y espirituales y han sucumbido. ¿Por qué? Por que el ser humano lleva en si la semilla de su propia destrucción, porque nunca ha sabido servirse concienzudamente y utilizado la esencia de su conocimiento para superarse a si mismo y así como en un circulo vicioso, cae victima de su propio ciclo destructivo.

Hemos comprendido que estamos en la tierra, como seres mortales que tratan de superarse continuamente, esforzándonos en adquirir los conocimientos que  nos permitan engrandecernos sutilmente y  elevarnos sobre nosotros mismos y cuando vislumbramos que estamos maduros para lograrlo, volvemos a hundirnos como especie humana. Porque?

Y así, no hay nada nuevo sobre la tierra. Nunca lo habrá? Triste destino. Todo es vanidad, todo es nada